¿SABIAS QUÉ?

La periodontitis y los monos

La periodontitis y los monos 150 150 Maestro

Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos compartir con vosotros el estudio que realizaron recientemente unos científicos estadounidenses.

Científicos de EEUU han descubierto que la enfermedad moderada de las encías en monos expuestos a un virus denominado SIV, similar al SIDA, contiene un índice más elevado de variantes virales causantes de infecciones e inflamaciones severas.

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Esto es importante porque la periodontitis moderada está presente en más del 50% de la población mundial. Sabíamos que la periodontitis severa conduce a la inflamación generalizada y a otras complicaciones de la salud, pero la novedad de este experimento es que las condiciones que han creado eran moderadas y estaban mayoritariamente localizadas en la boca.

Tras la infección con el virus animal similar al SIDA, la inflamación aguda generalizada inducida se volvió exacerbada en los animales con gingivitis, lo que demuestra que hasta la inflamación blanda localizada puede causar inflamaciones sistémicas más severas.

Tras haber expuesto ambos grupos de monos al SIV, en la boca no se observaron diferencias en el índice de la infección, lo que indica que una inflamación moderada de las encías no aumenta las posibilidades de contraer el virus del SIDA. Sin embargo, los animales que presentaban las encías inflamadas y contrajeron la infección, tenían más variantes virales causantes de infecciones y también registraron un aumento de la inflamación sistémica tras la infección.

Pruebas radiográficas dentales

Pruebas radiográficas dentales 150 150 Maestro

Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos compartir con vosotros un articulo sobre las recomendaciones para las pruebas radiográficas dentales.

En noviembre de 2012, la ADA (American Dental Association) y la FDA (Food and Drug Administration) pertenecientes al Servicio de Salud Pública de Estados Unidos, actualizaron sus recomendaciones sobre la realización  de pruebas radiológicas dentales. Uno de los principales mensajes de este documento es que no se debe realizar ninguna prueba de screening radiográfico previo al examen clínico del paciente. Las pruebas de imagen deben realizarse en función de las necesidades diagnósticas de cada paciente y no de forma generalizada.

Algunas de las recomendaciones concretas realizadas en el documento de la ADA son:

  • En niños con dentición primaria (antes de la erupción del primer diente permanente)

Para nuevos pacientes

– Pacientes sin evidencia de enfermedad y con contactos interdentales lo suficientemente abiertos para permitir la exploración: no requieren estudio radiográfico.

– Pacientes con evidencia de enfermedad o en los que las superficies interproximales no pueden ser visualizadas: se recomienda el uso de radiografías de aleta de mordida en zonas posteriores, combinadas si fuese necesario con radiografías  periapicales u oclusales.

En las revisiones

– Si el paciente tiene alto riesgo de caries y no se pueden visualizar las superficies interproximales: se recomienda realizar radiografías de aleta de mordida cada 6-12 meses.

– Si el paciente no tiene especial riesgo de caries y las superficies interproximales no pueden ser examinadas: se recomienda la realización de radiografías de aleta de mordida cada 12-24 meses.

  • En niños con dentición mixta

Para nuevos pacientes si hay signos o sospecha fundada de patología, se recomienda la realización de radiografías de aleta de mordida combinadas con ortopantomografía, o radiografías de aleta de mordida combinadas con radiografías periapicales.

En las revisiones

– Si el paciente tiene alto riesgo de caries y no se pueden visualizar las superficies interproximales se recomienda realizar radiografías de aleta de mordida cada 6-12 meses.

– Si el paciente no tiene especial riesgo de caries y las superficies interproximales no pueden ser examinadas, se recomienda la realización de radiografías de aleta de mordida cada 12-24 meses.

  • En niños con dentición mixta

Para nuevos pacientes si hay signos o sospecha fundada de patología, se recomienda la realización de radiografías de aleta de mordida combinadas con ortopantomografía, o radiografías de aleta de mordida combinadas con radiografías periapicales.

En las revisiones

– Si el paciente tiene alto riesgo de caries y no se pueden visualizar las superficies interproximales se recomienda realizar radiografías de aleta de mordida cada 6-12 meses.

– Si el paciente no tiene especial riesgo de caries y las superficies interproximales no pueden ser examinadas, se recomienda la realización de radiografías de aleta de mordida cada 12-24 meses.

  • En adolescentes con dentición definitiva (antes de la erupción del tercer molar)

Para nuevos pacientes radiografías de aleta de mordida combinadas con ortopantomografía o con radiografías periapicales en zonas seleccionadas.

En las revisiones

– Si el paciente tiene alto riesgo de caries y no se pueden visualizar las superficies interproximales, se recomienda realizar radiografías de aleta de mordida cada 6-12 meses.

– Si el paciente no tiene especial riesgo de caries y las superficies interproximales no pueden ser examinadas, se recomienda la realización de radiografías de aleta de mordida cada 18-36 meses.

  • En adultos (dentados o sólo parcialmente edéntulos)

Para nuevos pacientes radiografías de aleta de mordida combinadas con ortopantomografía o con radiografías periapicales en zonas seleccionadas.

En las revisiones

– Si el paciente tiene alto riesgo de caries y no se pueden visualizar las superficies interproximales, se recomienda realizar radiografías de aleta de mordida cada 6-18 meses.

– Si el paciente no tiene especial riesgo de caries y las superficies interproximales no pueden ser examinadas, se recomienda la realización de radiografías de aleta de mordida cada 24-36 meses.

  • En pacientes adultos edéntulos: en todos los casos los estudios radiográficos deben estar basados en los signos y síntomas concretos del paciente o en los tratamientos rehabilitadores planificados.

 El Observatorio Español para la Seguridad del Paciente Odontológico del Consejo General recomienda el uso de protección – delantales y protectores cervicales plomados – en los pacientes sometidos a radiaciones ionizantes (especialmente niños y mujeres en edad fértil).

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Crisis económica y práctica odontológica

Crisis económica y práctica odontológica 1240 552 Maestro

Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos compartir con vosotros el resultado de la encuesta elaborada para conocer cómo está afectando la crisis económica en la demanda de tratamientos odontológicos.

El Consejo General de Colegios de Dentistas ha elaborado una encuesta para conocer cómo está afectando la crisis económica en la demanda de tratamientos odontológicos.

La Organización Colegial de Dentistas quiere alertar a la sociedad del riesgo que supone para la salud dejar de visitar al dentista periódicamente, ya que son precisamente en las revisiones preventivas anuales donde el facultativo puede detectar nuevas patologías en fases incipientes pudiendo tratarlas de una forma sencilla y eficiente, así como realizar un adecuado seguimiento de los tratamientos realizados con anterioridad.

Las posibles patologías que pudiera tener el paciente terminarían agravándose con el tiempo, por lo que los tratamientos que habría que llevar a cabo en un futuro resultarían más complejos, tendrían un peor pronóstico y serían más caros.

Aquellas personas con dificultades económicas que necesitan tratamientos costosos están optando por retrasarlos, con el consiguiente riesgo de empeoramiento de la patología y la calidad de vida, o eligen otras alternativas terapéuticas que ni ofrecen los mismos estándares de calidad ni son los más recomendables.

Entre los tratamientos más afectados destacan los de estética y blanqueamiento dental, las prótesis fijas y los implantes. Por el contrario, la crisis económica está provocando un aumento en la demanda de endodoncias y prótesis removibles.

La Organización Colegial de los Dentistas insiste en su reivindicación de aumentar la cartera de servicios odontológicos que actualmente están incorporados en los Planes de Atención del Sistema Nacional de Salud. De este modo, se garantizaría a toda la población una asistencia sanitaria básica y, en especial, a los grupos más necesitados.

¿Qué es un biofilm bacteriano?

¿Qué es un biofilm bacteriano? 150 150 Maestro

Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos compartir con vosotros que es el «biofilm bacteriano».

La caries y las enfermedades periodontales se encuentran entra las patologías más prevalentes del ser humano. Estas están causadas por biofilms dentales. El biofilm es la forma de crecimiento que adoptan las bacterias para sobrevivir. Un biofilm es un ecosistema microbiano organizado, conformado por uno o varios microoganismos asociados a una superficie viva o inerte, con características funcionales y estructuras complejas. Las bacterias pueden presentarse en un medio líquido bajo dos formas de crecimiento: en forma libre o planctónica, o bien organizadas en estructuras o biofilms. Las bacterias en un biofilm se hallan en un substrato o superficie y muestran un fenotipo alterado en cuanto al grado de multiplicación celular o a la expresión de sus genes.

El biofilm presente en la cavidad oral va a producir patología a nivel local, como caries y periodontitis, pero también puede producir patología a distancia en el resto del organismo: accidentes vasculares agudos, partos prematuros y recién nacidos con bajo peso, neumonías, etc.

La prevención de las patologías asociadas a la placa dental iría encaminada al mantenimiento de un ecosistema asociado con la salud. Para conseguir este objetivo se pueden utilizar varias estrategias:

  • Eliminar o reducir la capacidad patogénica del biofilm, disminuyendo la carga bacteriana del mismo mediante tratamientos mecánicos: cepillado meticuloso, uso de seda dental, utilización de ultrasonidos, raspado y alisado radicular, etc.
  • Uso de antimicrobianos (colutorios, dentífricos, etc.). La aplicación a intervalos regulares de estos productos impediría la adhesión y la maduración del biofilm.
  • Terapias de sustitución. Cambiando los microorganismos presentes en el biofilm de forma que se recupere el equilibrio con las defensas del huésped. El uso de probióticos se enmarcaría dentro de la estrategia de sustitución, facilitando la presencia en el biofilm de bacterias beneficiosas para la salud a costa de la eliminación de distintos periodontopatógenos. Los requisitos para que un microbio sea considerado un probiótico son simples: el microbio debe estar vivo cuando se administra, debe estar  documentado que tiene un beneficio para la salud y debe ser administrado en ciertas dosis para conferir el beneficio.
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Factores de riesgo y prevención del cáncer oral (II)

Factores de riesgo y prevención del cáncer oral (II) 875 498 Maestro

Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos continuar con la segunda parte del post referido a los factores de riesgo y prevención del cáncer oral.

Prevención secundaria

Se refiere a la detección de la enfermedad en una etapa precoz de su historia natural. Una actuación temprana conducirá a la curación o a una minimización del daño, reduciendo finalmente la mortalidad.

El clínico debe realizar siempre una exploración completa de la mucosa oral, y especialmente en aquellas localizaciones de de alto riesgo, como por ejemplo el suelo de la boca y los bordes laterales de la lengua. En caso de sospecha, siempre es necesario realizar una biopsia y su correspondiente estudio histopatológico.

Prevención terciaria

El odontólogo debe actuar para reducir la posibilidad de la aparición de un nuevo cáncer oral y ayudar al paciente para minimizar los efectos secundarios de la terapia oncológica en la boca. El manejo odontológico del paciente antes, durante y después de la terapia oncológica puede reducir significativamente estas complicaciones y, consecuentemente, mejorar la calidad de vida del paciente. Se les debe informar acerca de las complicaciones que anticipamos en la terapia del cáncer ( mucositis, xerostomía, caries, etc.), y de las medidas que pueden adoptar para reducir al mínimo los efectos adversos de la terapia.

Hiposialia

Se trata de una disminución progresiva del flujo salival con alteraciones cualitativas de la saliva, que se vuelve más espesa y viscosa, con un pH más ácido. El paciente refiere xerostomía y la asocia a disconfort, dolor, dificultad en la deglución, la fonación y disfagia.   En los paciente que padecen hiposialia es muy importante que mantengan una meticulosa higiene oral, así como la aplicación de flúor. El consejo más importante para el paciente con la boca seca es la necesidad de beber un volumen de agua adecuado, aproximadamente 1,5 litros de agua al día, Cuando existe la posibilidad de estimular las glándulas salivales se pueden utilizar sialogogos. En este caso la pilocarpina es la droga de elección.

Caries post-radiación

La hiposialia favorece la colonización de la cavidad oral con microflora cariogénica. Éstas sueles ser caries agresivas, de rápida evolución. La prevención de estas lesiones debe empezar por la motivación en la higiene del paciente; se debe recomendar una dieta suave y equilibrada, así como evitar alimentos cariogénicos. Se recomienda la aplicación diaria de gel de flúor.

 

Infecciones secundarias por hongos

La alteración de las funciones de la mucosa oral, así como la hiposialia, la inmunosupresión producida por el tratamiento oncológico y la utilización frecuente de antibióticos, puede dar lugar a la aparición de infecciones oportunistas, siendo la más frecuente la candidiasis oral. Como medidas de prevención se debe reforzar las instrucciones de higiene oral , particularmente en los pacientes portadores de prótesis removibles.

Osteorradionecrosis

Es quizás la complicación más severa tras la radioterapia de cabeza y cuello. Se define como una zona de exposición ósea en un campo previamente irradiado. Aunque parece ser que el riesgo es máximo los 2 primeros años tras la administración de la radioterapia, éste se mantiene en el tiempo. La incidencia de la osteorradionecrosis puede minimizarse con una atención bucodental adecuada previamente a la terapia oncológica. Aunque puede aparecer de forma espontánea, la mayoría de los casos se asocian a exodoncias y, por lo tanto, se debe realizar la extracción de todos los dientes no restaurables y con mal pronóstico antes de iniciar la radioterapia para minimizar la necesidad de manipulaciones dentarias después del tratamiento oncológico.

En conclusión, destacar que al menos el 75% de los cánceres orales podrían prevenirse con la eliminación de los factores de riesgo, como el consumo de alcohol y tabaco.

El diagnóstico precoz del cáncer oral mediante la exploración de la cavidad oral y realización de técnicas complementarias mejora el pronóstico y la calidad de vida de estos pacientes. El correcto manejo odontológico del paciente antes, durante y después de la terapia oncológica es de suma importancia, puesto que puede reducir la aparición de complicaciones.

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Factores de riesgo y prevención del cáncer oral (I)

Factores de riesgo y prevención del cáncer oral (I) 875 499 Maestro

Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos compartir con vosotros los factores de riesgo y prevención del cáncer oral.

El cáncer oral constituye un grave problema sanitario en muchos países. No sólo genera una mortalidad significativa, sino que también provoca desfiguración extensa, pérdida de funcionalidad, cambios conductuales y problemas económicos y sociológicos.

La profesión odontológica tiene un importante papel en la lucha contra el cáncer oral, cumpliendo una tarea primordial en los tres niveles de prevención.

Prevención primaria

Está orientada a reducir la incidencia de la enfermedad. La etiología del cáncer oral es multifactorial, siendo los factores de riesgo más importantes el tabaco y el consumo elevado de alcohol; ambos factores actúan sinérgicamente, aunque cada unos de ellos posee potenciales carcinogénicos independientes. En algunos casos determinados productos químicos, la radiación ultravioleta de la luz solar, radiaciones ionizantes, infecciones, la dieta o situaciones de inmunodepresión pueden resultar especialmente relevantes. Son muchos los factores relacionados con el estilo de vida, pero el medio ambiente y la genética también juegan un papel importante.

Tabaco

Se considera tabaco cualquier preparación derivada de las hojas de las plantas del género Nicotiana y representa el mayor factor de riesgo para el cáncer en todo el mundo. La forma más frecuente de consumo en nuestro medio es la inhalación de humo de los cigarrillos, puros, puritos o pipas. El humo del tabaco contiene más de 60 carcinógenos conocidos.

El consumo de tabaco está asociado con diversos cánceres: oral, de faringe, laringe, pulmón, esófago, estómago, hígado, páncreas, riñones, uréteres y vejiga, cuello uterino y médula ósea. Además de los efectos negativos del tabaco sobre la salud general, el tabaco tiene un impacto significativo sobre la salud oral y puede afectarla de distintas formas: halitosis, tinción dentaria, pérdida de sentido del gusto, enfermedad periodontal, pérdida dentaria precoz, mayor fracaso de implantes dentales, infecciones micóticas, etc

Sin embargo, su efecto más importante sobre la cavidad oral, es que constituye un principal factor de riesgo implicado en el desarrollo de cáncer oral y de lesiones potencialmente malignas. El riesgo de cáncer aumenta significativamente cuando el consumo de cigarrillos al día es mayor de 20, la duración de hábito es superior a 20 años, y en aquellos sujetos que empiezan a fumar antes de los 15 años.

El tabaco negro presenta un factor de riego para el cáncer oral superior al de tabaco rubio.

Después del cese del hábito tabáquico y con la abstinencia sostenida en el tiempo, los efectos perjudiciales del tabaco sobre la cavidad oral disminuyen gradual y progresivamente en el tiempo. El abandono del consumo de tabaco conduce a una disminución del riesgo relativo de cáncer después de 10 años, hasta llegar a ser comparable al de las personas que nunca han fumado.

Alcohol

El papel del alcohol en el desarrollo del cáncer oral no está del todo claro. Fumar y beber alcohol son dos factores que a menudo se dan simultáneamente, lo que hace difícil evaluar sus efectos de manera individual.

El alcohol puede ser carcinogénico por varios mecanismos: en primer lugar puede actuar como un disolvente facilitando el paso de carcinógenos a través de las membranas celulares; en segundo lugar, el etanol aumenta la actividad metabolizante del hígado y, por lo tanto, puede activar determinadas sustancias carcinogénicas; en tercer lugar, el etanol produce una alteración del metabolismo intracelular de las células epiteliales; finalmente el etanol puede provocar una irritación local.

Los odontólogos deben identificar el abuso de alcohol y educar a los pacientes sobre su impacto negativo en la salud, como parte de su enfoque preventivo que debe incluir la higiene dental, el abandono del hábito y el consejo dietético.

Tabaco+alcohol

La conjunción de ambos factores contribuye a incrementar la incidencia de varias neoplasias, especialmente los cánceres de cabeza y cuello y está ligada a un peor pronóstico. Estos factores de riesgo a menudo coexisten como estilos de vida. Se estima que el riesgo de padecer cáncer oral atribuible a la combinación de alcohol y tabaco es del 80%.

Dieta

La dieta mediterránea esta particularmente asociada con un bajo nivel de riesgo de padecer cáncer oral. Los alimentos de origen vegetal y el alto consumo de diversos micronutrientes con propiedades antioxidantes y anticancerígenas, tiene un efecto beneficioso sobre los cánceres del tracto aero-digestivo.

La dieta juega un papel importante no sólo en la prevención sino también en el pronóstico de la enfermedad. Una ingesta semanal alta de frutas y verduras, antes y después del diagnóstico de un cáncer oral, se asocia con una menor tasa de recurrencia y un aumento de la supervivencia, así como un efecto protector frente a la aparición de segundos tumores primarios. Se ha relacionado un aumento del riesgo de padecer cáncer oral con una ingesta importante de carnes y productos procesados.

Virus del Papiloma Humano ( VPH )

El VPH se considera un factor carcinogénico importante de la cavidad oral y orofaringe. Se conocen más de 100 tipos de VPH. Se sabe que la principal vía de trasmisión del virus es la actividad sexual. La vacunación antes del inicio de la actividad sexual parece proporcionar mayores beneficios en la prevención.

Factores medioambientales

La radiación ultravioleta de la luz solar constituye un factor etiológico en el desarrollo del carcinoma de células escamosas del labio, fundamentalmente del inferior. La protección frente a las radiaciones solares puede disminuir la incidencia del cáncer de labio, por lo que debemos recomendar la utilización de cremas o reparadores labiales con protección solar.

(En el próximo post continuaremos con el tema del cáncer oral)

Cavidad oral, sida y sífilis

Cavidad oral, sida y sífilis 150 150 Maestro

Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos hablar con vosotros sobre el aumento de las enfermedades de transmisión sexual (ITS).

En los últimos años se ha observado un aumento importante en el número de infecciones de transmisión sexual (ITS) y, entre ellas, de la sífilis. Del mismo modo, también se ha observado un aumento leve de casos de nuevos infectados por el virus de la inmunodeficiencia humana (VIH). Estos incrementos preocupantes se deben a diversos factores: por un lado, las generaciones actuales no han conocido la epidemia del SIDA en sus años más virulentos y ven la infección por VIH como algo lejano y curable; por otro, los nuevos hábitos de comunicación y relación han facilitado los contactos sexuales de riesgo sin protección, tanto en los colectivos homosexuales como los heterosexuales, y parece que las ITS favorecerían la transmisión del VIH.

La candidiasis es la infección oral más característica de la infección por VIH. La forma clínica clásica es la candidiasis pseudomembranosa. La presencia de un tipo de esta candidiasis en un adulto joven «sano» debe ser sugestivo de inmunosupresión. No obstante, la candidiasis eritematosa es actualmente la forma más frecuente de candidiasis oral y aparece como una mácula rojiza típicamente en el dorso lingual y el paladar duro. También la presencia de esta lesión en una persona joven sin otros datos facilitadores, implica descartar la infección por VIH.

La queilitis angular (inflamación de las comisuras labiales) es otro proceso común de carácter crónico y recidivante en los pacientes VIH+, en el que intervienen bacterias y hongos.

Las infecciones víricas de la cavidad oral, principalmente las herpéticas, representan otra alteración común en la infección por el VIH. Lo más habitual son las infecciones recurrentes y mantenidas por el virus herpes simple, sobre todo las extraorales en los labios y en menor medida las intraorales, como lesiones ulceradas irregulares, dolorosas y mantenidas. Las infecciones por virus Herpes-Zoster a nivel trigeminal suelen ser infrecuentes.

En los últimos años hemos observado un incremento en la aparición de lesiones hiperplásicas epiteliales, como papilomas o verrugas, asociadas a la infección por el virus del papiloma humano en los pacientes infectados por VIH.

Las infecciones bacterianas orales en los pacientes VIH+ están asociadas preferentemente a la enfermedad periodontal y/o cariogénica que suelen ser especialmente agresivas.

La ITS más importante es la sífilis, que con frecuencia muestra lesiones orales en los estadios tempranos de la enfermedad. Las primeras manifestaciones de la enfermedad aparecen tras un periodo de incubación de 2 a 3 semanas tras el contagio sexual, como una úlcera indurada e indolora contagiosa en la zona de inoculación en genitales. La boca es un lugar frecuente de asiento del chancro y típicamente suele acompañarse de una adenopatía satélite que remite espontáneamente tras unas semanas.

Tras 4 a 6 semanas de la aparición del chancro, los pacientes que no son diagnosticados ni tratados, desarrollan la sífilis secundaria. Estos pacientes pueden presentar lesiones orales muy diversas, siendo las más típicas las placas mucosas opalinas. Estas lesiones normalmente se localizan en los labios, la lengua o el paladar y son extremadamente contagiosas. Otras lesiones son las pápulas eritematosas, úlceras, máculas rojizas o incluso lesiones blanquecinas simulando enfermedad liquenoide, leucoplasia e incluso macroglosia.

Tras esta etapa, si los pacientes no son tratados  pasan por un periodo de latencia en el que son contagiosos pero no presentan sintomatología y que puede durar años hasta que aparecen las graves alteraciones del sistema nervioso central, cardíacas u otras, típicas de la sífilis tardía o terciaria.

Por todo ello, el profesional odontólogo y su actividad clínica constituyen una pieza fundamental en el diagnóstico, la prevención y la reducción de la progresión de estas enfermedades de declaración obligatoria.

La halitosis (2)

La halitosis (2) 150 150 Maestro

Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos continuar con la segunda parte del post referido a la halitosis.

Tratamiento de la halitosis

Necesidades de tratamiento:

  1. Incluye la explicación de las causas y evolución de la halitosis y se realiza una profilaxis profesional. Posteriormente se instruye al paciente en técnicas de higiene bucal que incluyen práctica de limpieza lingual, cepillado, limpieza interproximal y uso de colutorios y dentífricos específicos. Por último, se programan revisiones dentales periódicas.
  2. Se realiza el tratamiento periodontal necesario en cada paciente. En caso de que sea necesario, se aplican los tratamientos odontológicos adecuados para cada caso.
  3. Se refiere al paciente a un médico o especialista.
  4. Se explican los datos obtenidos en el examen del paciente, se provee al paciente con más instrucciones profesionales y educación para que entienda que no presenta halitosis objetivable.
  5. Se refiere al paciente a un psicólogo clínico, psiquiatra u otro especialista de la psicología.

Tratamientos para cada tipo de halitosis

El tratamiento de la halitosis fisiológica, el de la halitosis patológica oral  y el de la pseudohalitosis serán responsabilidad de los profesionales de la odontología.

El tratamiento de la halitosis patológica extraoral será responsabilidad del médico general o especialista. El tratamiento de la halitofobia será responsabilidad de un médico general, psiquiatra o psicólogo

Estrategias terapéuticas para tratar la halitosis oral: El tratamiento de la halitosis tiene como principales objetivos:

  • Disminuir el número de bacterias productoras del mal olor presente, principalmente en el dorso de la lengua y en los surcos o bolsas periodontales.
  • Reducir los sustratos proteicos disponibles que intervienen en el proceso metabólico de las bacterias.

Estos objetivos se pueden conseguir mediante el uso de medidas de control mecánico y químico de los biofilms bucales. Las medidas de control mecánico incluyen los diferentes procedimientos de higiene mecánica (cepillado dental, higiene interdental…) y la limpieza lingual. En cuanto a las medidas de control químico, estas incluyen formulaciones y productos químicos.

Clorhexidina

La clorhexidina es el agente antiplaca y antigingivitis más efectivo y su efectividad en el control de la halitosis oral ha sido demostrada ampliamente. Sin embargo, el uso prolongado de colutorios con clorhexidina en las concentraciones convencionales al 0,12-0.20% se ha asociado con la aparición de efectos adversos tales como tinción dental y lingual, sabor metálico y alteración de la sensación del gusto. Este hecho descarta los colutorios con clorhexidina como la primera elección para el control de la halitosis, a pesar de haber demostrado una eficacia significativa en la reducción de los valores de compuestos sulfurados volátiles y organolépticos.

Triclosán

El triclosán es un agente antimicrobiano muy utilizado como agente antiséptico. Su actividad y sustantividad se ven incrementadas cuando se formula combinado con sales de zinc o con copolímero.

Nuevas estrategias terapéuticas: probióticos.

La halitosis puede convertirse en algunos casos en un problema crónico y los pacientes tienen que utilizar productos específicos de higiene oral de manera habitual, durante largos períodos de tiempo.

Los probióticos, según la Organización Mundial de la Salud, se definen como organismos vivos que cuando se administran en las cantidades adecuadas, son capaces de producir un beneficio en la salud del huésped.

Su uso en el campo de la halitosis oral tendría como objetivos ideales:

  • Eliminar o reducir la presencia de bacterias odorigénicas.
  • Conseguir una recolonización por bacterias que no sean capaces de producir compuestos malolientes y que compitan directamente con las bacterias productoras de mal olor (mediante generación de bacteriocinas o alterando sus factores de virulencia).
  • Reducir la producción de compuestos sulfurados volátiles y, por tanto, los valores organolépticos.

Protocolos de tratamiento para la halitosis oral

  • Halitosis genuina fisiológica
    • Limpieza y pulido dental profesional.
    • Instrucciones de higiene bucodental, que incluyen cepillado y limpieza interdental con seda dental o cepillos interproximales, y limpieza lingual suave 2 veces al día alcanzando la zona posterior de la lengua con un limpiador lingual.
    • Uso de un colutorio específico, 15ml durante un minuto, en forma de gargarismos 2 veces al día.
  • Halitosis genuina patológica oral
    • En primer lugar, deben corregirse todas las patologías orales presentes: caries abiertas, prótesis fijas y obturaciones sobrecontorneadas, gingivitis y periodontitis mediante raspado y alisado radicular o cirugía periodontal.
    • El resto de las medidas del protocolo son iguales al caso anterior.

Relación entre Enfermedad Periodontal y Enfermedad Coronaria

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Clínica dental en Oviedo

Desde nuestra clínica dental le damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde la clínica dental de Oviedo queremos compartir con vosotros la diferencia entre la enfermedad periodontal y la enfermedad coronaria.

Desde hace unas décadas atrás se está estudiando la relación entre la Enfermedad Periodontal y los eventos coronarios agudos, entre ellos el infarto agudo de miocardio y el accidente cerebro vascular. La pregunta es, ¿cómo una enfermedad inflamatoria crónica como la Enfermedad Periodontal se relaciona con otro grupo de enfermedades  que se producen por la obstrucción de una arteria por un trombo?
Una de las posibles respuestas es que tengan un origen común, en éste caso en particular, lo más estudiado es la teoría inflamatoria. De acuerdo a ésta, la conexión entre ambas patologías estaría dada por la liberación de factores proinflamatorios  generados en la enfermedad periodontal, que a su vez provocarían daño a nivel de los endotelios vasculares.
Siguiendo esa línea de razonamiento, que estas enfermedades tengan un origen común, hace que por ejemplo, un paciente tenga más probabilidades de tener un infarto si además padece enfermedad periodontal.
Es además por todos conocido que ambas enfermedades comparten factores de riesgo cuya presencia hace que las enfermedades tengan más probabilidad de establecerse, entre ellos el estilo de vida, el tabaquismos y el estrés.
El estilo de vida puede ser causa de ambas enfermedades. Es importante entonces, que el médico cardiólogo y el odontólogo pongan énfasis en el cambio de hábitos. Una vida saludable y un correcto cuidado bucal ayuda a la prevención.

La halitosis (1)

La halitosis (1) 150 150 Maestro

Clínica dental en Oviedo

En nuestra clínica dental damos muchísima importancia a tener una buena salud e higiene dental, es por eso que desde nuestra clínica dental de Oviedo hoy queremos compartir con vosotros un articulo recomendado por nuestros especialistas dentales sobre la que es una de las enfermedades bucales más comunes como la enfermedad periodontal.

CONCEPTO Y MANEJO CLÍNICO

Definición

El mal olor bucal, también llamado mal aliento o halitosis, se define como el conjunto de olores desagradables u ofensivos que emanan de la cavidad bucal, independientemente de cuál sea su origen.

La halitosis, por tanto, es una condición relativamente frecuente, cuya aparición produce gran preocupación en las personas que la padecen, no solo por las posibles implicaciones relacionadas con la salud, sino también por las posibles repercusiones a nivel psicológico que pueden llegar a afectar a su vida diaria, relaciones sociales, afectivas y profesionales.

Etiología

En aproximadamente el 90% de los casos, el mal olor se origina en la misma cavidad oral.

La presencia de mal olor se asocia con la aparición de sustancias malolientes que se generan como resultado de la degradación metabólica bacteriana (principalmente bacterias anaerobias gram-negativas). Este proceso ocurre sobre diferentes superficies orales (mucosas, dientes), en las bolsas periodontales y, especialmente, sobre la superficie dorsal de la lengua. Estos productos resultan de la fermentación microbiana de proteínas, péptidos y aminoácidos que contienen sulfuro, aportados por la saliva, sangre, fluido crevicular, neutrófilos, células epiteliales descamadas y, en menor medida, cualquier resto alimentario retenido en las superficies orales.

Halitosis y enfermedades periodontales

En un 90% de los casos de halitosis, el origen está en la boca y dos tercios de los casos orales, esto es un 60% de los casos de halitosis oral, están asociados con algún tipo de patología periodontal: gingivitis (31%) y periodontitis (28%). Por ello, el papel de los profesionales de la Odontología es clave en el control y tratamiento de estos pacientes.

  • Gingivitis: Existe una relación directa entre la inflamación gingival y el aumento de la concentración de compuestos sulfurados volátiles (CSV). Los sujetos con encías sanas tienen una menor concentración de CSV con respecto a los sujetos con gingivitis; en los pacientes con gingivitis, a medida que aumenta el grado de inflamación y la cantidad de biofilm acumulada, aumenta la concentración de CSV y, por tanto, los niveles de halitosis.
  • Periodontitis: La concentración de CSV en la cavidad bucal aumenta con la profundidad de sondaje. Los pacientes con una o más bolsas periodontales mayores de 5mm tienen valores de CSV un 30% más elevados que aquellos pacientes sin bolsas periondontales.

Evaluación del paciente con halitosis

Intervienen diferentes áreas:

– Cuestionario sobre salud general y hábitos: para conocer el estado de salud general, así como los hábitos de vida y costumbres.

– Cuestionario sobre la halitosis: información sobre el problema concreto de la halitosis.

– Cuestionario y exploración bucal: evaluación de la situación bucodental y hábitos de higiene. – Evaluación organoléptica. – Evaluación con detectores de gases. – Análisis microbiológico.

Clasificación de la halitosis

Incluye 3 categorías principales: halitosis genuina o verdadera, pseudohalitosis y halitofobia.

La halitosis genuina se subdivide a su vez en halitosis fisiológica o patológica.

Si no existe mal olor bucal pero el paciente cree que tiene halitosis se habla de pseudohalitosis.

Si después del tratamiento de la halitosis verdadera o de la pseudohalitosis, el paciente todavía cree que tiene halitosis, estaremos diagnosticando una halitofobia. Esta clasificación, por tanto, permite al clínico diagnosticar un problema psicológico.

Halitosis genuina: se percibe de manera obvia mal olor bucal por encima de los niveles socialmente aceptables.

  • Halitosis fisiológica: hay salud oral y el origen del problema se encuentra en la región dorso-posterior de la lengua; hay que descartar halitosis transitoria debido a factores alimentarios.
  • Halitosis patológica:
  1. Oral: Origen en la región dorso-posterior de la lengua, a la que se suman condiciones patológicas de la cavidad bucal (gingivitis, periodontitis).
  2. Extraoral: Origen en trastornos sistémicos, sobre todo en el tracto respiratorio superior y, en menor medida, en el tracto respiratorio inferior, enfermedades hepáticas, renales, etc.

Pseudohalitosis: el paciente se queja de halitosis no objetivable.

Halitofobia: queja persistente de halitosis no objetivable.

Proceso diagnóstico de la halitosis

El primer paso que hay que definir es si existe halitosis o no. En segundo lugar, hay que intentar aclarar si la halitosis es de origen oral o extraoral. En el caso poco frecuente, de que nos encontremos ante una halitosis extraoral, habrá que diagnosticar la procedencia del problema y remitir al paciente al especialista más adecuado, generalmente el otorrinolaringólogo.

La halitosis oral puede clasificarse, según su cronología, como transitoria o como patológica.

  • La halitosis transitoria tiene una cronología y unos factores desencadenantes definidos: halitosis al despertar, después de comidas pesadas o muy especiadas, después de la ingesta de bebidas astringentes como café, té y tras el consumo de drogas como el alcohol o el tabaco.
  • La halitosis patológica suele revelar una infección por bacterias anaerobias. Su origen puede provenir de localizaciones extraorales, principalmente infecciones en el tracto respiratorio. Pero lo más frecuente es que su origen sea oral, con dos fuentes principales: el dorso lingual y las infecciones periodontales (gingivitis, periodontitis). Estas tres patologías son las causas más frecuentes de halitosis patológica. En este caso, los mismos factores que se relacionaban con las halitosis transitorias pueden implicarse a las halitosis patológicas de modo coadyuvante, y deben considerarse otros factores: higiene oral, restauraciones desbordantes retentivas, caries, infecciones agudas (como abscesos), lesiones de las mucosas, boca seca (asociada o no a diferentes medicaciones), hábitos dietéticos inadecuados, poca ingesta de líquidos…

Dentro del diagnóstico de halitosis debe establecerse la respuesta del paciente ante su propio problema, ya sea excesivo, normal o escaso. Mientras que muchos pacientes conviven sin darse cuenta con un importante problema de halitosis, otro grupo de pacientes está obsesionado con sus problemas de mal aliento que solo ellos detectan.